viernes, 26 de diciembre de 2008

camila y yo.



  1. viejas fotos de tonos rojizos, me demuestran que siempre fuiste parte de mi vida. inmortalizadas allá por el ochentaitres, esperando a que nos recojan del cole, sudorosas y chimuelas, tu impecablemente peinada, con tus características colitas rubias/lacias decoradas con lazos de cuadritos rojos y blancos, yo paranoica, aferrándome a mi lonchera metálica de strawberry shortcake como si la monja del villa maria me la fuese a robar.


  2. destinadas a mundos separados, ya que yo vivía en san isidro y tu en la molina, una feliz jugada del destino hizo que coincidiéramos en la misma playa. en ese entonces, nadie la conocía como “asia”, y el entretenimiento juvenil estaba conformado por una pérgola con seis mesas, un futbolín y un enchufe en donde los fines de semana estaba permitido conectar un equipo de música. privadas de discotecas con espuma, desfiles de modas y fiestas de música electrónica, construimos nuestra amistad a base de profundísimas conversaciones en el murito del malecón, en las que intentabamos resolver las que por entonces eran nuestras maximas dudas existenciales. recuerdo un debate acalorado acerca de cual deberia ser el angulo promedio de una ereccion, y una polemica noche apostando cual de nuestras amigas perderia la virginidad primero


  3. si no recuerdo mal, el primer ingrediente que nos unió, fue nuestra adoración por el mar, las olas, las tablas… y venga, admitámoslo: los surfers. ya por entonces nuestra primitiva playa habia empezado a crecer, y empezaban a llegar especimenes de otros mares. nosotras, habíamos desarrollado un sentido del humor que estaba muy por encima de nuestros broceados amigos y de las rubilindas sandras y ximenas de la época. (literalmente nos reíamos en sus caras, cami, y tal vez fue por eso que nunca llegamos a ser siempre sus amigas, hermanitas menores, o sus mascotas… pero jamás sus novias!).


  4. despues llegaron años que podrian definirse como los mejores y mas divertidos de mi vida. nuestra burbujita se desintegró, y nos vimos sumergidas en la noche de lima, no esa noche plastica y predecible de los points de los noventas como el grill, sino en lugares nuevos. bizarro, el sargento, la luna, un hueco impresentable llamado tijeras (que luego fue bautizado como el dragon). kate moss era nuestra idola, jim morrison nuestro dios, y like a rolling stone, nuestro himno de batalla.


  5. por esa epoca nos dimos cuenta de que podiamos hacer otras cosas ademas de pararnos torpemente sobre tablas hawaianas o concocer la biografia de kelly slater. a mi me dio por escribir, y a ti por pintar y hacer accesorios. empezamos a intercalar las tardes de shopping con las galerias de arte, y ese año cambie mi colección de peliculas de perros que hablan, por visitas a pequeñas salas de cine en donde el audio era pesimo y saliamos convencidas de que apocalypse now habia sido filmada integramente en sepia.


  6. conocimos nuevos amigos, y nuevos bares. empezamos a coser nuestra propia ropa, y nuestros peinados y looks se sucedian con la velocidad de los bares de moda. lorelei, la democracia, el tunel, el decimo planeta. nos invitaban a fiestas en donde inexplicablemente siempre habia alguien desplomado o intoxicado en el suelo y las paredes estaban llenas de escritos de otros. te hiciste un tatuaje. nos hicimos groupies de una banda de rock. y una noche, en la playa, nos colamos en la casa de un vecino incauto para hacer skinny dipping en su jacuzzi.


  7. ahora pienso que gran parte de nuestra rebeldia de esa epoca era porque queriamos ser tan independientes y valientes como los hombres. nos volvimos viajeras. puedo cerrar los ojos y recordar esa vez en cajamarca, en que decidimos tirarnos a dormir a donde cayeramos, y pasamos una noche en blanco cagandonos de frio y contando estrellas fugaces. o mas cerca, ese verano en que nos hartamos de nuestra playa y huimos a punta hermosa, en donde alquilamos un cuarto a la tia remedios y terminamos la noche comiendo en casa de una mujer que veia marcianos y ocasionalmente se ganaba la vida animando eventos en los que mostraba el culo.


  8. y de pronto, y en paralelo, como siempre ha sucedido en nuestra historia, las dos decidimos dejar nuestra vieja lima en busca de otros rumbos. elegimos ciudades en las que siempre habiamos soñado vivir y teniamos un poco idealizadas gracias al cine y ciertas canciones. yo me fui a barcelona, corrupta y modernista, en busca de arte y un poco de vida, mientras que tu elegiste sydney, capital del mar y el verano casi eterno.


  9. la unica vez que nos vimos, despues de esa larga separacion, fue como si no hubiese pasado medio segundo desde nuestras eternas caminatas por la playa, o esas noches de cerveza que terminaban siempre de dia. creo que ni siquiera nos abrazamos. te vi identica, una mezcla de hippie californiana con mi bella genio, (espero que tu tambien me hayas visto igual). que alivio senti dias despues, entrando a la iglesia con mis nervios y mi vestido de novia de siete kilos, al verte en la puerta, sonriendome y convenciendome, como solo tu sabes hacerlo, de que todo estaba perfecto y que me casaria regia y divina (quien lo diria cami, despues de decadas de haber jurado eterna solteria y/o conviviencia!). despues me entere que ese dia habias amanecido con migraña y habias parado a vomitar en el camino. pero esa noche estuviste tan radiante, tan amiga, que no tuve la mas leve sospecha.


  10. y es justamente eso lo me queda de ti cami. la sonrisa tranquilizadora de una amiga que adoro hasta el fondo del alma. La confianza de que siempre estaras para mi, y yo para ti, para reirnos, comentar las ultimas tendencias de la moda, rajar de lima, burlarnos del mundo, analizar, conversar, llorar. aunque vivamos tan lejos y nunca me acuerde de la difenrencia horaria. aunque a veces pasen dos meses sin que ninguna coja el telefono. creo que ya te dije esto antes, pero te lo vuelvo a decir, mi cami: si fueras hombre, huevona, me hubiese casado contigo. TE AMO! feliz cumpleaños, parker.

jueves, 18 de diciembre de 2008

cerrado por vacaciones.

  1. me
  2. escapo
  3. primero
  4. a
  5. lima
  6. y
  7. despues
  8. a
  9. miami
  10. nos vemos en el 2009!

domingo, 14 de diciembre de 2008

dentro de diez dias...

  1. estaré lamentando, como todos los años, el haber gastado demasiado en regalos para los niños, que hoy en día tienen tantas cosas. pero ningún precio es poco en comparación a ese egoísta, efímero placer que uno siente al ver como sus caritas se iluminan durante unos segundos cada vez que abren un nuevo paquete.
  2. me daré cuenta de lo inútil que es pasar horas eligiendo la combinación perfecta de papel, cintas y caras tarjetas, para luego amanecerme envolviendo cada regalo como si fuese a exhibirse en la vitrina de harrod´s, cuando sé que menos de un día después, mis hermosos paquetes se habrán convertido en basura. pero, que artística y creativa me siento cuando veo debajo del árbol, mi pequeña montaña de regalitos perfectamente envueltos y decorados...!
  3. renegaré cuando mi bello I (que sospecho secretamente AMA pasear por el jockey plaza/el polo los 24 de diciembre a las 5 de la tarde), me obligue a acompañarlo a buscar regalos de última hora, cuando conoce mi aversión a las masas humanas y mi fobia contra las department stores capitalinas. agobiada, me veré tarareando "los peces en el río" mientras espero mi turno en la caja de falabella, detrás de doscientas personas, rezando para que a nadie se le ocurra lanzar una frase del tipo "de regreso pasamos por monte umbroso?".
  4. descubriré que, a pesar de que mi neurótica personalidad diez me obliga a empezar mis compras navideñas en agosto (como quien evita los apuros y aglomeraciones), he olvidado un regalo clave, imprescindible. para salvar la situación, no me quedará otra opción que reciclar algún regalillo ajeno, pensando en soluciones creativas como "si le doy este cutre top de algodón-lycra al tío B, me creerá que es una camiseta liviana para hacer bicicleta montañera?
  5. me veré obligada a cumplir el sueño materno de "ir con toda la familia a misa", y aunque al comienzo me la pasare conversando/teniendo ataques de risa con mis hermanos/rajando de los afanosos que van a misa de navidad vestidos como si fuesen a un matri, al final se me escaparán un par de lágrimas cuando pongan "ven a mi casa esta navidad", en particular durante la parte de "tu que recuerdas, quizá a tu madreee, o a un hijo que no estaaá..." buaaaa!
  6. me mataré de risa cada vez que alguien re-cuente alguna anécdota familiar, como la vez que mi mami pensó llevar a mi hermana al psicólogo porque su manualidad del nido fue un árbol de navidad color gris con bolas negras, o la vez que el abuelo se hueveó con sus regalos y a uno de mis primos le tocó una playstation y al otro, un polo del Sport Boys, o la vez que mi hermano accidentalmente se prendió fuego en el pelo y la ropa con una luz de bengala y el inolvidable tío J. intentó apagarlo con un vaso de whisky.
  7. ante la mesa del comedor, me veré obligada a acomodar en un solo plato un poco de puré de manzana, un pedazo de pavo, una chuletita de chancho con guindones, una cucharada de ensalada rusa, otra de ensalada "24 horas" (no pregunten, solo cómansela), un poco de arroz árabe y una porción de puré de camote con marshmellows. después, mientras alguien me ofrece un pedazo de panetón y una taza de chocolate caliente, me tomare media botella de cava para olvidar que todos estos suculentos platillos interactuarán en mi estomago durante las siguientes horas.
  8. me estremeceré y me solidarizaré con los perros, cuando empiecen a detonar los fuegos artificiales que afortunadamente en mi casa no están permitidos (ver punto 6). a partir de ese momento, evitaré entablar conversación con ningún niño, porque siempre a esas horas es cuando empiezan las preguntas trascendentales acerca de la existencia de papa noel.
  9. me emocionaré cuando empiece la repartición de regalos, al comienzo de forma organizada (con un niño que sabe leer, anunciando los regalos etiquetados amorosamente como "para Rafi, de su mamama" y repartiendolos uno a uno), y luego en caos total cuando alguien note alarmado que alguien no ha recibido nada aun y hay que buscarle algo YA, o que "falta un regalo chiquitito, en forma de triangulo, alguien lo ha visto?". me sorprenderé gratamente cuando abra el regalo de mi mami, que siempre me busca cosas lindas, y me divertiré cuando abra el regalo de la tía P, que cree que no sabemos que lo trae todo de tiendas como macy´s y luego les corta la etiqueta. me estresaré levemente cada vez que alguien abra un regalo mío, y buscaré adivinar en su mirada si realmente les gustó o no, haciendo notas mentales para tener en cuenta en los regalos de futuros años.
  10. me iré a dormir con I., agotada, empachada, un poquito ebria …y bastante feliz.

faltan cinco dias para ver a mi familia y diez días para navidad, wohooo!!!!!

lunes, 8 de diciembre de 2008

christmas wishlist.

(o “hay cosas que el dinero no puede comprar”)

  1. para mi adorado I. que todos tus sueños se hagan realidad. mejor dicho, que sigas haciendo realidad los sueños que uno a uno has ido logrando, gracias a tu trabajo, tu brillantez y tu voluntad de hierro. porque podría decirse que la inteligencia es genética, pero, y lo demás? de donde sacas tanta energía? como logras levantarte de la cama los domingos, para trabajar algunas horas porque el tiempo lo vale? como puedes resistir semanas enteras durmiendo cuatro horas cada noche, despertándote en ciudades que no conoces y nunca conocerás, salvo por sus hoteles para negocios y sus aeropuertos? te admiro hasta limites que a veces superan lo normal, pero es que me impresiona tu capacidad de hacerlo todo bien. me enorgullece que todo lo que tengas te haya costado y te lo hayas ganado tu mismo. mi chico diez, te mereces todos los premios que la vida pueda darte.


  2. para mi papi: una mejor relación con la poca familia que te queda. siento en el alma que la distancia, un maldito accidente de avión y el siempre oscuro camino de la depresión, te hayan robado a los que mas querías. se ninguno de los hermanos que te quedan tiene la intensa genialidad del confundido tío J, ni la risa campechana del jovencísimo tío H, pero al menos, están. se que el tío S siempre fracasará en sus absurdas empresas y terminará envejeciendo solo y pobre y posiblemente alcohólico, y que la tía L siempre le pondrá pellejitos a su ají de gallina y será un amasijo de nervios y reacciones infantiles, y que el tío B siempre será complicado en temas de plata e intentará dominarnos a todos y algún día tal vez al Perú y al resto del mundo; pero bueno, supongo que así son las familias. por eso, deseo, por tu tranquilidad mental, que este año todos se tengan un poco más de paciencia. (en un plano mas práctico, también te deseo que encuentres una enfermera capaz de soportar a la abuela E).


  3. para mi mami: disciplina, concentración, memoria y capacidad numérica. y es que este año has decidido pisar por primera vez una universidad para conseguir ese diploma que te fue esquivo durante tus años de adolescente botada de dos colegios, primero, y después, durante tu larga trayectoria como ama de casa a tiempo completo. animo mami, eres inteligente, exitosa y nadie que yo conozca tiene tanto sentido común como tu. solo falta que alguien más lo califique y lo firme en un cartón. todos tus hijos (esta bien, podrás seguir llamándonos tus bebés) estamos orgullosísimos de ti... suerte ma!!!


  4. para mi hermano: podría decirse que lo tienes todo. un millón de amigos, una novia preciosa que adora (y te soporta, je), un trabajo que te gusta. tal vez lo único que puedo desearte, es un par de alas. para salgas de la casa, te mudes (solo o ella), te vayas de viaje, en fin, te independices un poco del nido familiar que tanto te acomoda pero que a la vez ya te va quedando chico. y si se puede una yapita, te deseo que cambies de carro. yo se que te has encariñado con la tortuga y que si la tortura hablara podría escribir un libro y todo eso… pero ya toca, man!


  5. para mi hermana: te deseo que te enamores. (se que no estas del todo sola, pero tú sabes a lo que me refiero). quiero que para ti llegue un hombre (y no un chibolo), que se deslumbre con tu belleza, que llore de risa con tu acido sentido del humor, que encuentre adorable tu alergia de las mañanas y tu convicción de que rebelde way debería ser una telenovela de culto. que te engría, que te rasque la espalda, que alguna vez cocine para ti. que te acompañe en tus viajes y se lleve bien con tus amigas. algo me dice que este año lo conocerás, y serás tan feliz con él que te olvidaras de que, también durante todo el 2009, estas prohibida de ir al gym. ay chata, si pudiese regalarte un par de rodillas nuevas, créeme que lo haría!


  6. para mi amiga C. que te puedo decir. eres como el vino, que cada año está mejor. estas enamorada, felicísima, viviendo en un paraíso… mi regalo soñado para ti es también un poquito para mí, y es que en el 2009 puedas visitarme. imagínate parker, tu y yo juntas en europa… praga, roma, paris… el mundo!


  7. para mi amiga la colorada. tu también has tenido un año alucinante… pero creo que en tu cabecita roja hay tres letras que dan vueltas y vueltas y no te dejan tranquila… yo también las veo en tu futuro, y cada vez con mayor claridad… M…. B…. A…. el icing on the cake seria que el muchacho (novio será cundo lo presentes en sociedad!) se vaya contigo y convivan juntos en, no se, Georgetown o Fontainebleau. El icing egoísta seria que convivan juntos en Zurich, jeje.


  8. para la doctora PCH. es mi respetuoso deseo, doctora, que tras esta nueva titulación en su ya importante currículo, su regreso al Perú le traiga mayores satisfacciones profesionales en algún prestigioso estudio capitalino. le recomiendo, sin embargo, abstenerse de trabajar con un tal nagazaki, que últimamente no gana ni una línea de bingo.


  9. para mi prima-hermana V. tu vida es un torbellino. con dos niñas, un marido hiperactivo, una madre chiflada, un padre esotérico, una maestría y un trabajo que no te deja ir, porque si él no llegarías a fin de mes, entiendo que estés medio loca. por eso te deseo PAZ en mayúsculas. para un poco, cálmate. respira. el mundo no se va a terminar porque la mayor te contesta mal y la menor se come los cargadores del celular. tu matrimonio no esta destruido porque la secre le regalo un peluche a tu esposo. tu madre no va a suicidarse si no la llevas este verano a la playa. se que casi todo el tiempo fantaseas con abandonarlos a todos y encerrarte a meditar mientras te masajean el poto con aceite en un spa budista y pato velarde te diseña un vestido. pero no puedes. aguanta un poco, bruja. PAZ.


  10. para mi sobrina-hija F. se que a tus casi ocho años, ya detestas tu competitivo colegio laico-mixto-británico, y siendo la menor de tu clase, en la que casi no hay niñas, eres el blanco de los ataques de quince insoportables mocosos. déjame decirte algo pequeña (algo que hoy probablemente te entrará por una oreja y saldrá por la otra, porque a tu edad es imposible fijarse en esas cosas): no se cómo hicieron tus padres contigo, pero eres absolutamente preciosa. con esos inmensos ojos granadilla-caleidoscopio. con esa delicada barbilla partida. con ese pelo largo y lacio, que se vuelve rubio bajo el sol y en invierno cae pesadamente sobre tus hombros como una capa de piel. eres felina y estilizada. se también, que naciste con alma de vieja y por eso te cuesta tanto reírte disforzadamente con las demás niñas y unirte a sus juegos simplones. mi adorada pequeña que te sientas sola en los recreos y que cuentas las horas para volver a casa y escuchar las mismas cincuenta canciones que dan vueltas en tu ipod! tu pesadilla no durará para siempre. en un par años, si no ya-mismo, los niños que ahora te torturan caerán rendidos a tus pies. las niñas que ahora ríen disforzadamente, crecerán regordetas y pachochas, y seguirán juntándose únicamente entre mujeres durante las tres próximas décadas. mientras tanto, tu te habrás convertido en una princesa, y habrás terminado de leer los libros de pintura que compramos en paris y tanto te gustaron, y serás capaz de elegir a tus propios amigos. mi bebé, si a los siete años te gusta the cure, estoy segura de que vas por buen camino. esta navidad, te deseo un poquito mas de paciencia para que tus años escolares se pasen pronto. y que papa noel (que no seré yo), te traiga la laptop, el iphone y el mega-nano-whatever-nintendo que pediste, enana materialista!

    (para los interesados, mi regalo soñado viene en cajita turquesa. adjunto foto)

martes, 2 de diciembre de 2008

diez parrafos para un cuento con final feliz.

  1. E tenia unos nueve años cuando escucho a la voz por primera vez. la voz le pregunto, con curiosidad infantil: te has dado cuenta de que hay niñas en la clase que son muchísimo mas flacas que tu? E se sorprendió. hasta ese día, ella clasificaba a sus compañeras de clase en términos como su gusto por las barbies o su habilidad para darse aspas de molino, o si después de clases se quedaban a gimnasia acrobática o a basketball, o incluso si eran de las que coleccionaban stickers, o papeles de carta. todo lo anterior era importantísimo en la comparativa, mientras que términos como “flaca”, “delgada”, “normal” o “gorda”, hasta ese día, no habían sido considerados. esa misma tarde, mientras la miss Alice dictaba oraciones, E empezó a recorrer la hilera de al lado con la mirada, comparando el grosor de las pequeñas piernas, pantorrillas y rodillas que se sucedían a lo largo de la fila.
  2. poco tiempo después, en el colegio nuevo, la voz le dijo a E: todas las chicas grandes que tienen novio y son populares y están invitadas a las fiestas de promoción de los colegios de chicos populares, tienen una cosa en común además de tener el pelo largo hasta la cintura y usar jeans guess: todas son flacas. t-o-d-a-s. E nunca se había dado cuenta de ese pequeño, pero al parecer importantísimo detalle, y decidió en el futuro prestar atención para comprobar si lo que le dijo la voz era cierto. observando a las chicas mayores y populares de pelo hasta la cintura, E se enteró de que muchas de ellas tiraban su almuerzo por la ventana del bus escolar, y no pocas se alimentaban a base de batidos de leche y plátano, especialmente en vísperas de alguna fiesta especial. la voz le dijo, todas están haciendo algo por su cuerpo menos tu. ante tal ultimátum, E decidió renunciar a las tres cosas que mas disfrutaba por ese entonces: la mantequilla de maní (un viejo hábito norteamericano), los chocolates y la comida chatarra.
  3. a pesar de los nuevos sacrificios de E, la voz empezó a interrumpirla, cada vez con mas frecuencia, para hacerle notar que la detestable gordura se seguía acumulando en los lugares menos esperados. de a pocos, E empezó a aceptar que la voz siempre tenía la razón. un día, mientras se alistaban para una fiesta, su amiga R le reprochó: “con esa minifalda al cuete se te ve un potazo”. otro día, en el carro, su mami la miró de reojo y le dijo: “antes de regresar a la casa paramos a comprarte un formador”. y aun otro día, una tía que la vio después de meses en una reunión familiar, le dijo frente a todo el mundo, “E, no puedo creerlo… ya tienes cuerpo de grande!”. el resto de tías-amigas de su mami celebraron, satisfechas, y ella se encerró en su cuarto a mirarse en el espejo, roja de vergüenza, el corazón agitado latiendo a mil. la voz rompió el silencio para decirle, eres gorda y grotesca.
  4. al poco tiempo, la mamá de E. volvió maravillada de un viaje con su amiga L, diciendo cosas como “puedes creer que la regia de L, en todas las tiendas pedía talla uno? la única talla que le queda bien es la uno! toda la piel de su cuerpo es como la de su cara: no tiene un solo gramo de grasa!”. ante la excitación de su madre, E dedujo que ser talla uno (en los ochentas no existía la 00) era algo muy bueno y digno de admiración. la voz y su mami, concluyó, no podían estar equivocadas. y por primera vez en su vida, y a pesar de que para evitar ser asmática, nadaba tres veces por semana, E pidió que la metieran al gimnasio. si faltas un solo día, vas a engordar! la animó la voz durante todo ese año en que llegaba agotada del colegio o la natación, y tenía que correr a cambiarse para hacer aeróbicos al ritmo de una escultural instructora de veinte años.
  5. durante los meses que pasaron, la lista de alimentos prohibidos por la voz fue aumentando paulatinamente. es que ya nada parecía satisfacerla! cada vez qué E se llevaba algo a la boca, la voz la insultaba con desdén: basta de comer, gorda tonta. la mamá de E, firme creyente en el binomio comida = amor, no comprendía que pasaba con su hija, y preocupada, le preparaba sus platos favoritos y le llenaba la refrigeradora de cositas ricas, sin saber que todo eso era mucho peor para E. la voz le dijo que su madre era su enemiga, y por lo tanto había que engañarla para seguir adelante. acaso no sabes mentir, gordita? con el tiempo, cada vez que a E le preguntaban si ya había almorzado, la voz se apresuraba en elaborar una excusa creíble. y es que la voz era capaz de inventar las mas complicadas explicaciones, inexistentes fiestas de cumpleaños en las que E se había atiborrado de pizzas y helados de chocolate y volvía a casa empachada, o extrañas dolencias estomacales que causaban que durante días su organismo solo pudiese contener choclo sancochado y mandarinas. la voz resulto hizo que pronto E se convierta en una gran manipuladora, una maestra del engaño.
  6. el colegio terminó, y la voz siguió acosando a E hasta que casi dejo de comer por completo. a pesar de que era verano, su piel adquirió una tonalidad amarillenta. el pelo se le caía por mechones, y se oscureció al punto que sus amigas pensaban que se lo había teñido. cansada de especulaciones, fue a la peluquería y pidió que le hagan un corte de chico. cuando finalmente la gente dejó de reconocerla y sus compañeros de clase empezaron a pasar frente a ella sin saludarla, la voz le aseguró, están tan envidiosos de ti que no se atreven a hablarte. cuando ningún cinturón era capaz de mantener sus jeans en su lugar, la voz le dijo, ponte un pantalón de pijama grueso debajo y así nadie notara que te quedan inmensos. siguiendo los consejos de la voz, dejó de usar camisetas de manga corta. la voz era lo máximo. estaba tan cómoda así, acurrucada en la cama todo el día, envuelta en capas de ropa y mantas, como una cebolla. solo ella y la voz sabían que hacia poco, desempolvando un baúl con juguetes y ropa de la infancia, E había logrado probarse sin problemas su pequeño vestido de primera comunión. acababa de cumplir dieciocho años.
  7. y es que ahora, lejos del control de las monjas y gracias a los convenientes horarios de la universidad, la voz podía trabajar libremente las veinticuatro horas del día. si en un momento de descuido E mordisqueaba una manzana o se tomaba una cerveza, la voz no la dejaba dormir hasta que se levantaba nuevamente de la cama y hacia cientos de abdominales o planchas. muchas veces, la voz se le aparecía en sueños, obligándola a prender la luz de su escritorio, buscar su centímetro, y tomarse, a las cuatro de la mañana, las medidas de cintura, caderas, muslos y brazos, para luego anotar las cifras en un cuaderno. la voz se había convertido en un sargento implacable: hace días que no bajas nada, gorda.
  8. "estas enferma, necesitas terapia", le dijeron a E. no podrán callarme, respondió altiva la voz. una psicóloga maligna empezó a inmiscuirse en la vida de E. la voz se negaba a hablarle cuando se citaba con ella. la casa se llenó de reglas. cenar siempre con la familia (fácil), arremangarse siempre las mangas (aceptable), terminar el plato completo en quince minutos (difícil), abstenerse de jalar el water sin que antes papi o mami hayan revisado su contenido (jodido). eso te pasa por hacerles caso, mira como te están humillando, le seguía diciendo a E. la voz. pensé que eras más fuerte, pero eres una gorda tonta. "fuerza E, te vas a recuperar pronto", le decía la psicóloga, que no siempre era tan maligna y a veces la abrazaba fuerte, acariciándole la cabeza hasta hacerla llorar.
  9. pasaron varios años antes de que E lograra acallar a la voz por completo. solía volver inesperadamente, sobre todo durante los momentos difíciles: cuando su padre la cagaba en un negocio y discutía con su madre, por ejemplo, o cuando no se sentía aceptada en su primer trabajo. pero E ya se había dado cuenta de que la voz no era su amiga, y si justamente aparecía entonces, era porque la sabía vulnerable. por eso E, envalentonada, aprendió a darle cara, a responderle y cuestionarla, incluso cuando la voz insultaba con odio y la atacaba con las bajezas que mas le dolían.
  10. un día de invierno, E se percató de que había pasado un año completo; un año normal con altas y bajas, con pequeños triunfos, decepciones y problemas, sin que la voz se atreviera a pronunciarse. alguna vez, tímidamente, habia intentado empezar a decir algo, pero E la calló con un manotazo de indiferencia y siguió mirando la nieve caer mientras terminaba su delicioso panino de tomate con mozzarella. y fue así como la voz entendió que E ya no la escucharía nunca mas, y desapareció para siempre. pero ese no fue el verdadero triunfo. lo mejor fue cuando, casi en el mismo instante, E logró comprender que -pese a lo que la voz le había asegurado durante tantos, incontables años- ella era una buena persona, que merecía ser amada y valorada, con toditos sus defectos y virtudes -ninguno de los cuales podia medirse en kilos o centímetros- y nadie podría jamás decirle lo contrario (y por cierto, E tampoco era gorda, y apenas un poquito tonta).

    (nada de brazaletes rojos ni nicknames de princesa/hada/mariposa/angel para mi. solo una sonrisa de satisfacción, porque al terminar de escribir esto, E ha bajado 10 toneladas de bagaje emocional, y en estos momento se está dando a si misma un merecido pat on the back).